De la unicidad de las ideas

 

Chemistree

No es lo mismo ser un conjunto de partes que interactuando recíprocamente forman parte de un ser vivo que ser la partícula más pequeña del universo, el grado mínimo de complejidad material que sólo admite contener una única cosa en su existencia. 

¿De qué estamos hablando?

Estamos hablando de que una cosa es ser un cuerpo y otra muy distinta es ser una partícula. 

La historia de las ideas se ha topado con un esquema de razonamiento peligroso y superficial. Se está tomando la parte como si fuese el todo. 

Las ideas están siendo compactadas en formas de pensamiento único, extremista y sin matices. Se desvanece paulatinamente el estante dentro del cual las ideas se permiten intersticios de contradicción, peldaños subatómicos en los cuales algo puede ser y no ser al mismo tiempo. Ahora las ideas parece que debiesen venir enlatadas y con un sólo significado dentro. Estamos ante un cambio de paradigma racional, abandonando una etapa en la cual se permitía que una cosa no se parezca por momentos demasiado en sí mismo, y entrando en una etapa donde la cosa tiene que ser a pesar del mundo, tiene que ser una sola y solo una, sin espacio para perplejidades o si quiera para un ápice de duda de que estamos frente-a-la-cosa-que-es-dada.

Hago este anuncio más como una advertencia que como una tesis. Debemos temer de aquello que haga que nuestras ideas estén muy claras, tenemos que dudar cuando pensamos que tenemos certeza, detenernos mientras nos disponemos a caminar. 

Tenemos que pensar como un cuerpo, con interrelaciones, conflictos y variedad de ideas. 

Srce Pojdel