El Proyecto Neptuno

 

Veremos cómo se aprovecha la peor crisis de abastecimiento de agua potable de por lo menos 4 décadas en el área metropolitana de Montevideo (y varios centros urbanos del país) para ofrecer una solución que contamina una región que viene cascoteada, vamos a conocer El Proyecto Neptuno.

Ph: Matilde Campodónico, 2023

CONTEXT

Este proyecto busca extraer agua del Río de la Plata en la zona de Arazatí (San José) para potabilizarla y reforzar el suministro del área metropolitana de Montevideo. No es el primer proyecto de este tipo que se planifica, ya hubo un proyecto de potabilización para Casupá, que propuso la construcción de una planta en la cuenca del río Santa Lucía.
Arazatí, en San José
Casupá no iba a tener un efecto tan rápido como el que se estima que tendría Neptuno. No se concretó debido la falta de consenso sobre su viabilidad técnica y ambiental, además de las preocupaciones sobre el impacto en el ecosistema de la región.

Hubo estudios que evidenciaron que la calidad del agua en la zona no era la ideal para una planta de filtrado sin riesgos adicionales. En vez de Casupá, apareció ahora Arazatí, o el Proyecto Neptuno, una supuesta alternativa pero que según profesionales en la materia resultaría igual o aún más nociva que lo que pretende mejorar. 

Este proyecto enfrenta serias preocupaciones ambientales, como la alta salinidad en la zona y la constante proliferación de cianobacterias, que ponen en riesgo la calidad del agua potable. La Asociación de Limnología del Uruguay (LimnoUy), un colectivo de 50 profesionales que estudian nuestros ecosistemas acuáticos continentales, emitió sus consideraciones, son bastante claras

Básicamente, LimnoUy señala que la alta salinidad, la turbiedad y las floraciones tóxicas de cianobacterias comprometerían la potabilidad del agua extraída. Por esto se considera que el Proyecto Neptuno - Arazatí no cumpliría con el objetivo de reforzar el sistema de abastecimiento metropolitano.

Hay que recordar que la región ya viene castigada por contaminación transfronteriza y el impacto de infraestructuras, como el emisario del Riachuelo, que obligan a que las evaluaciones sean especialmente rigurosas. 

¿Qué es el emisario del Riachuelo? 

Es una infraestructura subacuática que descarga efluentes del asqueroso Riachuelo porteño hacia el Río de la Plata. Su proximidad al Río de la Plata plantea preocupaciones ambientales, ya que afecta la calidad del agua en la región.

Emisario del Riachuelo

¿Entienden que hay un túnel 12 km río adentro tirando caca al Río y ahora quieren agarrar esa agua y dártela? Lo digo en criollo por si no se entiende.

Además, es una zona en la que se han registrado eventos que pueden ser considerados pequeños tsunamis, debido a movimientos telúricos en el lecho marino. El Río de la Plata tiene una naturaleza muy fluctuante lo cual hace que esta posible planta no garantice una fuente confiable ni segura de agua potable. Informes indican que la variabilidad climática y fenómenos como El Niño y La Niña pueden aumentar los niveles de salinidad en el río, dificultando la potabilización.

Es posible que este asunto de la salinidad no le quite el sueño a muchos gobernantes, hay que recordar que hace algunos meses se cambiaron los valores, en particular de sodio, y hasta el propio Ministerio advirtió que puede afectar la dieta, “sobre todo de pacientes con hipertensión arterial severa, insuficiencia cardíaca o insuficiencia renal”. En ese momento OSE avisó que las personas con “hipertensión”, “enfermedades renales”, y “una dieta restringida en sal”, deben “extremar los controles de presión arterial, no descuidar sus controles médicos y, en caso de ser posible, consumir agua embotellada”, lo cual se sumó a algunas declaraciones ciertamente innecesarias de su Presidenta. 

Edgardo Ortuño, director de OSE por el FA declaró que el proyecto “se aprobó con falta de transparencia” y que su costo, a pesar de su asociación con privados – o quizá a causa de- es más caro que si lo hiciera 100% el Estado. El problema no es nuevo, ningún Gobierno lo ha sabido encarar y, desde 2019, tiene forma de crisis hídrica y afecta a más de 1 millón de personas en Montevideo, mostrando la fragilidad del sistema de abastecimiento de agua en la región

Científicos del Instituto de Ecología y Ciencias Ambientales (IECA) y el CURE han propuesto mejorar el estado de la cuenca del Santa Lucía como solución más efectiva a largo plazo. La Universidad de la República ha pedido un análisis exhaustivo sobre los efectos del proyecto, destacando el riesgo para la biodiversidad, el impacto paleontológico y en el ecosistema acuático.

Un informe de la Facultad de Ciencias concluye que el Río de la Plata es altamente dinámico, lo que complica la toma de agua potable de forma constante y segura. Los investigadores proponen evaluar alternativas más sostenibles y seguras, protegiendo tanto la salud humana como los ecosistemas de la región.


Asimismo, para muchos y al haber empresas privadas trabajando en conjunción con el Estado, estamos creando un antecedente para una eventual privatización del agua potable del país, algo que ya fue saldado en 2004.

La evaluación de proyectos de gran escala como Neptuno debe ser rigurosa y considerar no solo la eficiencia a corto plazo, sino también la preservación de los recursos naturales.

 

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