Arte Artificial
Postulados como que lo que nos hace humanos tiene alguna relación con lenguajes, formas de expresión y canalización de emociones que caminan (o directamente se sumergen) en el mundo artístico cada vez tienen menos credibilidad, si es que alguna vez la tuvieron. El concepto de arte ha sido, es y será tan difuso que prácticamente no tenemos forma de explicar que algo no pueda ser interpretado como eso, una obra susceptibles de portar algún sentido hasta cuando no lo tiene inicialmente.
Primer obra de arte creada por IA y subastada |
También tenemos algoritmos poéticos, como Arts Experiment, que escribe cosas así:
A give the charm of the great winds and the waters,
My gay winds and the summer cloud.
Incur to the south, the broad and gloomy sun,
An orange rock, or on the stream of the storm,
An attemp becomes a fire.
The sun
My memory still may still appear.
A dar el encanto de los grandes vientos y las aguas,
Mis vientos alegres y la nube de verano.
Incur al sur, el sol amplio y tenebroso,
Una roca naranja, o en la corriente de la tormenta,
Un intento se convierte en un incendio.
El sol
Mi memoria todavía puede aparecer
Dentro del entendido de que eso que conocemos como hacer poesía tiene que ver con condensar conceptos (en alemán la palabra dichtung significa poesía y condensar en iguales formas) evidentemente hay una calidad un tanto enrevesada en la poesía de un algoritmo que genera conceptos complejos.
También algún detractor podrá inducir que la IA solamente crea cosas al azar usando bancos de datos artísticos, lo cual no difiere demasiado del proceso creativo de muchos artistas.
Obra creada con Night Café Creator |
Es posible que falten algunos recambios generacionales para que estos tipos de arte hoy alternativos tomen el reconocimiento que aún no tienen. Hoy son más un objeto de fetiche relacionado con juguete nuevo y no se les da mucho valor por encima del mencionado.
Ni la literatura ni la pintura de las IA tienen un gremio que se sienta compelido a promocionarlas o motivación que los lleve a la autopromoción que puede buscar un artista, digámosle, convencional. Géneros tienen que nacer, discusiones tienen que gritarse y un montón de gente tiene que aborrecerlo, amarlo y sentirse identificada o amenazada en similares proporciones. El único arte que fracasa es el que a nadie le genera nada.
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