Ontologías: No te lo puedo creer
Radiohead
Parece una tontería, casi un silogismo, pero cuando alguien dice "no puedo creerlo" a veces lo está diciendo de forma literal, no figurada.
¿Qué significa no poder creer algo?
Implica tener todos los elementos probatorios, todas las conclusiones, los indicios y señales, la patente de corso de que sí, algo está aconteciendo. Todo lo tenés delante de tus ojos y pueden pasar días, meses, años... podés pasarte una vida entera sin "poder" creerlo. Vas a negar la realidad que ves hasta el borde mismo que deshilacha tu razón, ese lugar en el que sentís que llegaste a algo. Ese momento mágico que todos (espero) tuvimos alguna vez, dentro del cual sentimos acontecer a un "despertar" de algo nuevo. Porque es una verga eso de los "wokes" que usan la trascendencia espiritual para infiltrar un discurso neoliberal... pero todos alguna vez pensamos haber despertado.
¿Por qué no llegamos a creer x cosa?
Las razones son tantas como creencias o negaciones puede haber, ya estamos ante un mecanismo más complejo. En el fondo de toda incredulidad subyace el límite de lo que estamos dispuestos a aceptar y esa trampa suele ser emocional. No podemos creer que un hermano, aire de tu aire, vida de tu vida, se haya convertido en un horco incivilizado para quien sos un objeto, algo descartable. No podemos creer que un día nos caigan las fichas que estuvimos coleccionando durante años, convencidos de que nada puede ir mal, cuando todo indica que ya no queda nada por lo que insistir.
¿Qué se hace con la incredulidad?
Se agradece. Se le tiene paciencia. En la fé radica toda voluntad humana por perseguir lo que ya no existe. No creerse del todo una cosa es, ante todo, un gesto heroico y liberador, también triste y desolador; pero como consuelo vamos a poder explicar que no, ya no nos comemos el mismo verso dos veces.
Comentarios